miércoles, 6 de julio de 2016

ASESINATO DE DIANA DE GALES Y DODI AL-FAYED

El 31 de agosto de 1997 falleció como consecuencia de un accidente automovilístico al interior del Túnel de l'Alma, en la margen norte del río Sena, en París, Francia. Junto a ella perecieron también su novio Dodi Al-Fayed y el conductor del automóvil, Henry Paul. El único superviviente del accidente fue el guardaespaldas de Al-Fayed, Trevor Rees-Jones: nadie excepto él llevaba puesto el cinturón de seguridad.
Mohamed Al-Fayed, padre de Dodi y dueño del Hotel Ritz Paris (lugar de trabajo de Henry Paul), ha dedicado varios años de su vida intentando comprobar una posible conspiración4 por parte de la Familia Real Británica y el Servicio Secreto Británico. Sin embargo, investigaciones llevadas a cabo en Francia no arrojaron indicios que respaldaran dicha tesis. Posteriormente, la Operación Paget (investigaciones realizadas por la policía metropolitana londinense, acerca de la muerte de Diana de Gales y Dodi Al-Fayed), efectuada en 2006, desechó por completo la idea de una conspiración.

Funeral

Aunque inicialmente la Familia Real se negó a conceder a Diana un funeral de Estado, las muestras de afecto y dolor por parte del pueblo británico obligaron a Buckingham a cambiar de parecer. El protocolo es muy estricto y los funerales con exequias de Estado se reservan para miembros de la casa real con rango de majestad, o en su defecto, a gobernantes nacionales relevantes. En el protocolo también existe un tipo de funeral llamado funeral real, reservado a miembros de la casa real con rango de alteza real, categoría en que la Princesa tampoco poseía en el momento de su muerte.
Así, y puesto que no existía normativa para una princesa del Reino Unido divorciada y madre del segundo y tercero en la línea de sucesión, hubo que acuñar un nuevo término para rendir honores fúnebres a Diana: "Un entierro único para una persona única". Así lo definió un portavoz de la Familia Real, más de 24 horas después del accidente.
El cuerpo fue trasladado el martes 2 de septiembre a Londres desde la capital francesa. Simultáneamente, miles de ciudadanos anónimos habían depositado ramos de flores y cartas de condolencia en las verjas del Palacio de Buckingham. A su llegada fue trasladado a la Capilla Real del Palacio de St. James, residencia oficial del Príncipe de Gales, donde se habilitaron cuatro libros para permitir que todo visitante pudiera transmitir sus condolencias. El ataúd permaneció cerrado en todo momento pues los allegados a Lady Diana así lo quisieron. Hasta el sábado 6 de septiembre, fecha oficial del funeral de Estado, se decretó luto nacional y las banderas de todo el país ondearon a media asta.
El funeral de la Princesa de Gales en St. James Park, Londres.
El féretro, siempre cerrado y cubierto con el estandarte real y coronas de flores depositadas por sus hijos, fue trasladado en procesión sobre un carruaje arrastrado por cuatro caballos negros hasta la Abadía de Westminster. Tras él caminaban el príncipe Felipe, duque de Edimburgo, el Príncipe de Gales, el hermano de la princesa, Charles, conde Spencer, quién pronunció un memorable y emotivo discurso-homenaje en el funeral, y los hijos de la princesa fallecida: Guillermo y Enrique. Una inmensa multitud, calculada en más de dos millones de personas, acompañó a la comitiva por las calles de Londres.
En la Abadía había numerosos representantes de la nobleza, la política y el círculo humanitario. No obstante, hubo notables ausencias –como embajadores y cónsules-, por no tratarse de un funeral de Estado propiamente dicho. Sí acudió, por ejemplo, Jacques Chirac junto a su esposa y, desde luego, el entonces flamante primer ministro británico Tony Blair, quien calificó a la difunta Diana como la Princesa del pueblo. La ceremonia, propia de una reina, contó con la actuación en directo del cantante británico Elton John, amigo personal de la Princesa, quien interpretó el emotivo tema "Goodbye England's Rose", versión reescrita de su conocida Candle in the Wind.
Concluido el funeral, el féretro fue trasladado por carretera hasta la capilla de Santa María en Great Brington, a dos kilómetros de Althorp House, la mansión donde creció Diana. El cuerpo fue inhumado como los del resto de miembros fallecidos de la familia Spencer, en una ceremonia estrictamente familiar.
Se comunicó que los restos mortales de la Princesa se colocarían en una isla artificial situada en los jardines de la finca, formada por 14 000 hectáreas. Se erigió un monumento conmemorativo en forma de templo con dos lápidas de mármol con inscripciones y una imagen de Diana, pero no está claro el lugar exacto donde fue enterrada.

No hay comentarios: